En el Libro XIV de su monumental crónica conocida como la Monarquía indiana, fray Juan de Torquemada suelta el revelador comentario de que la caída de Tenochtitlan no fue el 13 de agosto de 1521 sino el día anterior. Explica que, por conmemorarse ese día a Santa Clara de Asís, que “no estaba en el calendario en la tabla general del rezado”, lo pasaron al siguiente, en el que se veneraban “los benditos santos Hipólito y Casiano”.