El cristianismo primitivo conmemoraba en esa fecha la natividad de Cristo y con ella se pretendió sustituir una fiesta egipcia: el nacimiento del dios Aión, hijo de una virgen. Esta fiesta se hacía para bendecir los dones del Nilo, cuyas aguas se tornaban del color del vino en estas fechas. De hecho, en las iglesias orientales, cada 6 de enero se celebró el nacimiento de Cristo durante mucho tiempo; también era el día en que se bautizaba a los catecúmenos. Después que Constantino reconoció a las iglesias helenísticas (312-313), el nacimiento de Jesús se celebró el 25 de diciembre (una fiesta dedicada a Mitra) y el 6 de enero quedó como el día de la adoración de los magos.
¿Cuándo empezó esa costumbre? Es difícil de precisar. Lo evidente es que emigró de la península ibérica a Nueva España, donde a mediados del siglo XVI la costumbre de “dar una música” se había arraigado entre la población de origen europeo. Con el paso de los siglos, el ritual se popularizó y alcanzó a todas las clases sociales. En la actualidad, con los cambios de paradigma en las relaciones entre hombres y mujeres, ha venido a menos el entusiasmo por tales muestras públicas de amor, aunque a la vez sobreviven.
Porfirio Díaz montado sobre el artículo 7, rompiendo la Constitución con la cabeza, al tiempo que saca los ojos a la prensa independiente, que se ahoga, junto con la opinión pública, ante el embate del dictador en ciernes.
La velocidad y pericia de los practicantes de la pelota vasca y sus diferentes variantes conquistaron la capital de la República desde finales del Porfiriato. Los espacios para observarlos resultaron insuficientes una vez estabilizado el país tras la Revolución.
La ciudadanía es una idea muy antigua que las distintas formas organizativas del hombre viviendo en sociedad ha transformado. En la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos de 1917, por ejemplo, se exigía haber cumplido dieciocho años, siendo casados, o veintiuno si no lo son, además de tener un modo honesto de vivir.
Inaugurada en septiembre de 1969, se proyectó para ser parte de una glorieta que ampliaría y redireccionaría vialidades como Insurgentes y Chapultepec, en una ciudad donde los espacios de negocios, restaurantes y esparcimiento se expandían más allá del Centro Histórico, en lugares como la Zona Rosa.
Reseña del libro Bajo El signo de Taller. El nacimiento literario de Octavio Paz, Efraín Huerta y José Revueltas. Autor Xalbador García Rodríguez. México, El Colegio de San Luis, 2020, 358 p. Precio: 515 pesos.
Reseña del libro De ángel del hogar a oficinista. Identidad de clase media y conciencia femenina en México, 1890-1950. Autora Susie S. Porter. México, Colmich, 2020, 304 p. Precio: 414 pesos.
Reseña del libro Robachicos. Historia del secuestro infantil en México (1900-1960). Autora Susana Sosenski. México, UNAM/Grano de Sal, 2021, 280 p. Precio: 330 pesosReseña del libro Robachicos. Historia del secuestro infantil en México (1900-1960). Autora Susana Sosenski. México, UNAM/Grano de Sal, 2021, 280 p. Precio: 330 pesos
Hasta hace algunos años, existía una cantina de nombre Zirahuén en el número 83 de la avenida Cuauhtémoc, en Ciudad de México. Era un antro medio en el subsuelo que olía a alcohol rancio y orines fermentados. Poseía unos lastimados asientos de gabinete de vinil color vino, una barra destartalada y el baño de hombres más diminuto de todas las cantinas mexicanas.
“Apenas se iniciaban los trámites para reformar la Constitución, y ya Vasconcelos buscó adquirir, reconstruir y reparar los viejos edificios existentes, necesarios para la obra educativa”.