Tras conocerse la noticia, se difundió la duda: ¿fue un “asesino solitario” o el presidente Porfirio Díaz estuvo detrás del atentado? Y es que el general Corona era un reconocido político y militar al que muchos veían como presidenciable, en un momento en el que Díaz aún no había conseguido que se aprobara la reelección indefinida. La idea de que el presidente estaba vinculado al asesinato de Corona se esparció durante años y, como suele ocurrir con los magnicidios y las pugnas por el poder, la sospecha se mantiene hasta nuestros días