Aquella noche caviló y caviló hasta que, jugando con las acepciones de “tiempo”, finalmente se le ocurrieron aquellos versos que hasta hoy cantamos cada que amamos y añoramos la dicha inicua de perder el tiempo.

Treviño se benefició del deslinde de tierras y se hizo con excelentes propiedades en las que se instalarían empresas de renombre, como la Cervecería Cuauhtémoc.

En la segunda mitad del siglo XX, una de las labores encomendadas a Treviño desde la capital de la República fue la de expulsar definitivamente a los apaches, comanches y familias próximas, por lo que el veterano de la Guerra de Reforma se mantuvo en pie de guerra muchos años.

Sin duda, era un lugar con raigambre aristocrática, pues allí se edificó la residencia de los condes del Valle de Orizaba, conocida como Casa de los Azulejos (que pervive como un Sanborns).

Nada como esperar con ansias la llegada del salario y… ¡tener que pagar las cuentas acumuladas en la tarjeta de crédito! O tal vez solo parte de ellas.

Además de la Doctrina Estrada, también es nombrado en su honor el Archivo Histórico Genaro Estrada, acervo documental de carácter histórico de la Secretaría de Relaciones Exteriores.