“Toma el mundo en un abrazo de amor” resonó con fuerza en las radios de América y Europa a partir del verano de 1968, un momento cumbre en la oleada de paz, amor y esperanza que inyectó la idea un mundo mejor en millones de consciencias juveniles alrededor del mundo, las cuales incluso desafiaron a sus gobiernos. El verso era parte de Born to Be Wild, canción de la banda californiana Steppenwolf que se convertiría en un himno de su generación.
¿En qué contexto económico se desarrolló el Movimiento estudiantil? Hasta 1968 la economía se había portado bien. Bien en términos de crecimiento medido por el Producto Interno Bruto, bien en términos de estabilidad. Y si en el México de entonces no había inflación, tampoco había devaluaciones. Los dólares de a 12.50 pesos nos acompañaron a lo largo de veinte años y las tasas de interés eran un dato más de un entorno macroeconómico por demás sólido. Incluso en términos de distribución, la economía tenía buenos resultados. El poder adquisitivo de los salarios crecía y el gasto social per cápita hacía lo propio.
Crónica de la represión a estudiantes en Nuevo León en 1934
Treinta y cuatro años antes del 68, un movimiento estudiantil en la Universidad de Nuevo León también terminó reprimido a balazos. En su desarrollo, el gobernador Pablo Quiroga y el general Plutarco Elías Calles hicieron correr el rumor de que detrás de los jóvenes estaban “los judíos capitalistas, el clero y la reacción”. En realidad, habían sido apoyados por los sindicatos comunistas contra la “educación socialista” y la imposición de un rector, cuando el presidente electo era Lázaro Cárdenas.
En las sesiones de la Cámara de Diputados no hubo reclamos al presidente Gustavo Díaz Ordaz –que desde el principio asumió la responsabilidad- argumentando que había cumplido con su deber- no obstante la gravedad de los hechos ocurridos.
En la primavera de 1968 comenzó a soplar un viento extraño en las universidades más prestigiosas del mundo. Muy pronto se extendió a las plazas públicas en todos los continentes y a México llegó en verano para poner en duda costumbres públicas y certezas políticas. Fue la fiesta de la crítica que precedió la tragedia. En este artículo se reconstruyen los hechos, se describen las ideas y las formas de comunicación del movimiento que en esos dos meses cambiaron el país.
La familia Madero y sus redes empresariales en el noreste mexicano (1855-1910)
Los Madero consolidaron su presencia económica en el noreste al contraer matrimonio con otras prominentes familias empresariales, como la de Jorge Hernández Benavides, quien se desempeñó como un importante funcionario del llamado grupo de los “científicos” durante el Porfiriato.
La familia Madero y sus redes empresariales en el noreste mexicano (1855-1910)
Ernesto Madero fue el hijo mayor de Evaristo en su segundo matrimonio. Era accionista de dos importantes firmas de metalurgia pesada a principios del siglo XX: la Fundidora y Afinadora “Monterrey” y Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey. Durante su gobierno, Francisco I. Madero lo nombró secretario de Hacienda.
La familia Madero y sus redes empresariales en el noreste mexicano (1855-1910)
Evaristo Madero y sus descendientes tuvieron a Monterrey como uno de sus principales núcleos de operaciones. La capital nuevoleonesa fue escenario de la intervención familiar en numerosas empresas, aunque algunas se ubicaban en otros lugares del noreste mexicano.
La familia Madero y sus redes empresariales en el noreste mexicano (1855-1910)
La fundación del Banco de Nuevo León en 1892 dio un fuerte impulso a los negocios de la familia Madero, así como al desarrollo empresarial de Monterrey.
La familia Madero y sus redes empresariales en el noreste mexicano (1855-1910)
Durante la Guerra de Secesión (1861-1865), Evaristo Madero traficaba el algodón de los confederados que no podía exportarse desde los puertos de Estados Unidos a causa de la contienda; la mayor parte la colocaba en Europa, vía Matamoros, con lo que también beneficiaba a los ejércitos sureños.
Con su experiencia durante la Guerra Civil estadounidense, Evaristo Madero tuvo una participación significativa en el auge algodonero de La Laguna y en el desarrollo de la industria textil regional.
Por una desgraciada coincidencia, dos de los peores temblores que ha sufrido México ocurrieron el mismo día, con más de tres décadas de diferencia. Los dos se parecen mucho entre sí y al mismo tiempo son totalmente diferentes. Ocurrieron en el mismo país, pero este ha cambiado bastante con el paso de los años. Afectó casi a los mismos lugares pero se encontró con una población que ya lo esperaba. Si el sismo de 1985 colaboró a transformar este país, el terremoto de 2017 ya lo encontró muy diferente a como era.