Durante el siglo XIX, México atravesó por un periodo de turbulencias políticas y sociales que provocaron el estancamiento de la economía. Para contrarrestarlo, los diferentes gobiernos buscaron impulsar el desarrollo del país atrayendo colonos e inmigrantes, con el fin de apoyar las metas del liberalismo: modernidad, paz y progreso.
García Martínez estudió cómo parte de la organización política de las sociedades mesoamericanas pervivió después de la conquista española y se mantuvo en la época colonial.
A espaldas del antiguo templo de San Agustín, en el número 81 de República de El Salvador, donde hoy se alza parte de la Farmacia París, están los vestigios del pasadizo. En el balcón de la extrema derecha se observan los cambios en la fachada que indican que allí iniciaba un extremo del arco.
Algunos brebajes medicinales, diuréticos, laxantes y otras sustancias podían resultar peor que la enfermedad. Tal era el caso del mercurio, que durante muchos años fue un remedio muy popular, pese a que su uso puede ser mortal.
Tras su estancia en México, D. H. Lawrence, el afamado autor de La serpiente emplumada, murió en Francia en 1930. En la foto lo acompaña su hermana Ada.
Este inmueble es además sede del Centro de Documentación e Investigación Ferroviarias, uno de los acervos más importantes de América en cuanto a conservación y rescate de planos, fotografías y diferentes legajos sobre la historia del mundo del ferrocarril en México.
La avenida Paseo de la Reforma en Ciudad de México
Pocas vialidades tienen la posibilidad de ser no solo testigo sino también protagonista del devenir de nuestro país como Paseo de la Reforma, por cuyas aceras han caminado los más notables personajes de los procesos que marcaron el correr de México a través de los siglos. Desfiles triunfales, caminatas imperiales, héroes reformistas y hasta una palma han adornado el paisaje de esta avenida de la capital mexicana tan cargada de historia.
Con Los relámpagos de agosto, Ibargüengoitia satirizó el género de las memorias militares de aquellos que habían participado en la Revolución. La novela no aludía a los años heroicos del movimiento revolucionario, sino al auge del Maximato callista tras el asesinato de Álvaro Obregón, época en que también ocurrieron los levantamientos de Francisco R. Manzo y Gonzalo Escobar.