De origen zapoteca, con mirada fuerte y alma festiva, ellas son las protagonistas del istmo de Tehuantepec. Tehuana, didjazá, “paisana” e istmeña son sinónimos para identificar a la oriunda de la región. Desde el siglo XIX, viajeros y artistas mostraron enorme interés por estas mujeres; se sorprendieron con su belleza y vestimenta, pero en especial por el comportamiento igualitario ante los hombres, a diferencia de otros grupos indígenas.