Sabemos que los chichimecas vivieron en el norte de lo que hoy es México, en un gran territorio que, se acepta, comienza en nuestro país en el Trópico de Cáncer y llega al sur de lo que actualmente es Estados Unidos de América. Es un espacio enorme que la arqueóloga Beatriz Braniff Cornejo propuso se llamara la Gran Chichimeca. Ahí “vivió gente con diferentes tipos de subsistencias: cultivadores, cazadores, recolectores, pescadores, etcétera”.