El Colegio de Tlatelolco representa el proyecto más importante que haya tenido lugar en la Nueva España para la educación de los indígenas y la compenetración de las tradiciones occidental y mesoamericana. Al cabo de sesenta años, miles de indígenas adquirieron en el colegio las herramientas jurídicas, literarias, administrativas y lingüísticas para comprender el nuevo orden y garantizar la comunicación entre los mundos indígena y español. El dominio del latín les abrió las puertas para el conocimiento de las ciencias, la filosofía y el derecho occidentales. De Tlatelolco salieron notables intelectuales y escritores indígenas, como Hernando de Alvarado Tezozómoc, Fernando de Alva Ixtlilxóchitl, Juan Bautista Pomar o fray Diego Valadés, y muchos otros asumieron cargos de autoridad en sus pueblos, como gobernadores, alcaldes o miembros del cabildo.