La Revolución Mexicana fue una  época  de reformas políticas y sociales, pero también de conmoción y tragedia, como la que vivieron los niños reclutados por todos los bandos para engrosar sus fuerzas militares. 

Se convirtió en una de las historietas más populares y vendidas en México y Latinoamérica, condición que mantuvo durante veintiséis años.

La monumental obra narra una historia que inicia con las naves hundidas por orden de Hernán Cortés en las costas de Veracruz y concluye con la instrucción de “quemar y destrozar los ídolos”.

De largas filas de negros y brillantes autos Packard y Cadillac desciende la élite citadina y personajes famosos embutidos en rigurosa etiqueta. 

Su vida en el arte de la lente le dio la oportunidad de mostrar su trabajo en decenas de publicaciones.

Un comando armado, encabezado por el pintor chihuahuense David Alfaro Siqueiros, tomó por asalto la casa de Trotsky, pues como partidario del comunismo de Stalin, el artista planeaba asesinarlo.