Los espías nazis en México: un pasquín para el Reich

Ricardo Lugo Viñas

Timón. Revista Continental tuvo también un lineamiento indiscutiblemente nazista, por lo que durante mucho tiempo se ha especulado sobre las razones que motivaron a José Vasconcelos, su director, a seguir ese camino.

 

El número doce del semanario Timón. Revista Continental, cuyo director era el justipreciado José Vasconcelos, apareció en los escaparates y quioscos mexicanos el 11 de mayo de 1940. En sus páginas interiores se publicó una fotografía en la que aparecía retratado el propio director de la revista y, a lado suyo, un hombre espigado, afable y engallado de origen teutón. Al pie de la página se podía leer: “El agregado de prensa de la legación alemana, Arthur Dietrich, y el director de este semanario”.

De 48 páginas, con un elevado costo al público –cincuenta centavos; la mayoría de los periódicos costaban en esa época tres centavos– y producida en una radiante oficina en la calle de San Juan de Letrán número 68, en el centro de la Ciudad de México, Timón fue una polémica publicación de abierta filiación nazi, bajo la férula y el manto del que en otros tiempos fuera secretario de Educación Pública y candidato a la presidencia de la República.

En ella, Vasconcelos escribía verdaderos panegíricos para el Reich. Por ejemplo, en el editorial del número dieciséis, se puede leer, de la pluma del que también fuera rector de la Universidad Nacional Autónoma de México: “Hitler, aunque dispone de un poder absoluto, se halla a mil leguas del cesarismo. La fuerza no le viene a Hitler del cuartel, sino del libro que le inspiró su cacumen. El poder no se lo debe Hitler a las tropas, ni a los batallones, sino a sus propios discursos... Hitler representa, en suma, una idea, la idea alemana, tantas veces humillada antaño por el militarismo de los franceses, la perfidia de los ingleses. En contra de Hitler, es verdad, se hallan combatiendo ‘Democracias’ gobernadas por civiles. Pero son democracias de nombre”.

Aunque es cierto que en aquel momento existía un ambiente germanófilo en gran parte de México y América Latina, seguirá siendo una incógnita los motivos que llevaron a Vasconcelos a dirigir dicho pasquín. Se llegó a decir que era un agente al servicio del Tercer Reich. De cierto modo, Vasconcelos intentó hacer pasar aquel semanario –que a todas luces se mantenía de los emolumentos del gobierno nazi, bastaba ver sus portadas y anuncios, todos rotunda y abiertamente alemanes– como una publicación de corte cultural. Entre la propaganda pronazi, el furibundo contenido antisemita o antigringo y los ditirambos a los soldados del Eje, en Timón se podían leer fragmentos de novelas, cuentos y opiniones de colaboradores como el escritor oaxaqueño Andrés Henestrosa o Gerardo Murillo, mejor conocido como el Dr. Atl, entre otros. De modo que, la fotografía antes mencionada no parece fruto de la casualidad y resulta sintomática en un momento en que la propaganda nazi se infiltró en los contenidos de buena parte de la prensa mexicana gracias a los buenos oficios de Dietrich, que incluyeron, desde luego, jugosos “moches”.

Los protagonistas de aquel momento capturado en plata sobre gelatina, tête à tête, tuvieron otro momento de coincidencia: apenas un mes después de publicada la fotografía, el 11 junio de 1940, el ministro de Relaciones Exteriores, Eduardo Hay, presionado por el gobierno de EUA, “invitó” a Arthur Dietrich a abandonar el país, con la intención de “poner fin a la descarada campaña de propaganda nazi” que se había desatado en los canales de la prensa nacional. Dicha acción del gobierno mexicano incluyó el cierre y censura del semanario Timón, justo un día antes de que las tropas nazis invadieran Francia.

 

Si desea leer el artículo completo, adquiera nuestra edición #162 impresa o digital:

“1994. El año que cambió a México”. Versión impresa.

“1994. El año que cambió a México”. Versión digital.

 

Recomendaciones del editor:

Si desea saber más sobre extranjeros cautivados por México, dé clic en nuestra sección “Extranjeros perdidos en México”.

 

Title Printed: 

Los espías nazis en México (II)