La caricatura tiene mucho de premonición. En marzo de 1877, el caricaturista Tenorio Suárez vislumbra el militarismo de Porfirio Díaz –quien estaba a unas semanas de alcanzar su primer periodo presidencial–.
Aquí retrata su cabeza dentro de la boca de un cañón y llama al cartón “Ultima ratio-regum” (última razón de los reyes), cuyo origen se remonta al reinado de Luis XIV, de Francia, quien hizo inscribir tal sentencia en los cañones de su reinado, entre los siglos XVII y XVIII.
El cartón, también, muestra el porte militar de Díaz, con traje de gala y un dado como condecoración. Sin duda, ya desde esos años se perfilaba hacia el autoritarismo.
De Ignacio Tenorio Suárez no se conocen mayores datos, pero es parte de la camada de grandes caricaturistas litógrafos del siglo XIX mexicano.
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Agustín Sánchez González. Historiador especializado en caricatura mexicana e investigador en el INBAL. Ha publicado una treintena de libros; entre ellos, Los humoristas gráficos y el exilio en México (2017), y Crímenes y horrores en el México del siglo XIX (2017). En 2019 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo Cultural René Avilés Fabila.
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