Col. Moderna, Del. Benito Juárez, C.P. 03510

Llamado por el destino a terminar enfrentado contra los realistas, contra el ejército donde se formó como militar experimentado, contra los que habían sido sus compañeros de armas, Sucre, como Bolívar, también provenía de una familia acomodada, asentada  en el norte de Venezuela en una de las primeras ciudades fundadas en tierras continentales de América, llamada Cumaná. Ahí nació, un 3 de febrero de 1795 quien pasaría definitivamente a la historia después de conducir la estratégica batalla de Ayacucho y obtener la victoria que terminó con el yugo español en buena parte del territorio sudamericano.

Crecido en el seno de una familia con larga tradición militar, no pasó mucho tiempo antes de ser enviado a Caracas al cuidado de su padrino, el arcediano de la catedral, presbítero Antonio Patricio de Alcalá. Siguiendo el mandato familiar ingresó a la Escuela de José Mires, donde cursó estudios de ingeniería militar. En 1809, con catorce años cumplidos integra, junto con su hermano Pedro y otros jóvenes cadetes, la compañía de Húsares Nobles de Fernando VII, unidad organizada por Juan Manuel de Cajigal y Niño, gobernador de la provincia de Cumaná.

Se vivían tiempos de cambio, muchos jóvenes militares de origen criollo sintieron inquietudes y terminaron por combatir al lado de quienes propugnaban la independencia para poner fin a trescientos años de dominación. Cuando apenas había cumplido 18 años, Sucre se incorpora a una compañía que se hacía llamar Libertadores de Oriente y participa con éxito en la liberación de Venezuela. Ese mismo año su hermano Pedro es fusilado después de una batalla por los realistas en La Victoria. En Cumaná, víctimas del odio y la desesperación de quienes se mantenían fieles al rey, mueren su hermano Vicente y su hermana Magdalena. Según sus biógrafos son numerosos los familiares de Sucre, se habla de por lo menos 14, muertos en medio de la Guerra de Independencia. Incontables son los méritos militares de Sucre que lo llevan desde muy joven a ocupar posiciones importantes en diferentes puntos del territorio que abarcó la compleja y difícil batalla por la liberación en las provincias y entidades que funcionaban bajo la administración del reino en aquella extensa región. 

Esta publicación es un fragmento del artículo “Sucre” de Jaime Bali Wuest y se publicó íntegramente en Relatos e Historias en México, núm. 18.