A sus veintiséis años, Juan O’Gorman (1905-1982) construyó la primera casa de estilo funcional en su natal Ciudad de México, bajo los postulados del teórico de la arquitectura de origen suizo, Le Corbusier. Con ello, marcó el inicio de la historia de la arquitectura moderna en nuestro país.

Con un estilo fuera de las convenciones y ya consagrado como un importante arquitecto, en 1966 O’Gorman fue invitado a Texas, Estados Unidos, para diseñar un mural, como parte de la celebración por los 250 años de esa ciudad. Esta obra de grandes dimensiones fue montada en el frontispicio del Teatro Lila Cockrell y se tituló Confluencia de las civilizaciones. Fue diseñado de manera similar a lo que el artista había hecho en el mural de la Biblioteca Central de la UNAM.

Este 2016 el mural de Texas cumple cinco décadas, razón por la que la sede de la UNAM en San Antonio organizó una serie de conferencias para conmemorar su nacimiento y revalorar esta obra de uno de los más importantes artistas mexicanos.

“O’Gorman: color, arte y vanguardia” de La Redacción y se publicó íntegramente en la edición de Relatos e Historias en México, núm. 94.