En 1916, el entonces presidente de la República, Venustiano Carranza, emitió un decreto que instruía la fundación de la Escuela Nacional de Química Industrial, antecedente directo de la Facultad de Química de la UNAM, en el pueblo de Tacuba. El maestro jalisciense Juan Salvador Agraz fue el encargado de advertir al mandatario sobre la importancia de educar a los jóvenes del renovado Estado mexicano en los campos de la industria metalúrgica y la petroquímica. Así, la escuela inició labores el 23 de septiembre de ese año. Décadas más tarde, en 1965, se convirtió en facultad.
Distinguidos egresados han confirmado el prestigio académico de esta casa de estudios, con premios como el Nobel (Mario Molina) o el Príncipe de Asturias (Francisco Bolívar Zapata).
Este año, la Facultad de Química celebra su primer siglo de existencia con coloquios, conferencias, una carrera atlética y un concierto de la Orquesta Sinfónica de Minería, además de la emisión de un billete conmemorativo de la Lotería Nacional y un sorteo que se jugará en septiembre, entre otras actividades. Para mayor información visite el sitio web www.quimica.unam.mx.
“Un siglo de química” de La Redacción se publicó íntegramente en la edición de Relatos e Historias en México, núm. 94.