La vida de Modesta Abascal aún está por escribirse. Modesta fue costurera y militante del Partido Liberal Mexicano en la Ciudad de México. Desde 1900 empeñó su vida en la lucha por los derechos de las mujeres; por su militancia antiporfirista  fue encarcelada por primera vez en 1907. Se dice que apenas en libertad, y por iniciativa propia, se empleó como trabajadora domestica en la casa del vicepresidente Ramón Corral, con la intención de intercambiarlo por liberales presos en San Juan de Ulúa, entre los que se encontraba Juan Sarabia, purgando una condena de siete años. En sus memorias, Nicolás T. Bernal rercuerda que ella distribuía el periódico Regeneración, editado en el exilio por Flores Magón, y que también lo hacía llegar a Emiliano Zapata. Aunque Modesta estuvo en la primera fila de las luchas obreras durante la Revolución, su imagen, como las de otras mujeres, se ha desdibujado en el curso del tiempo. 

La nota breve sobre "Modesta Abascal" se publicó íntegramente en Relatos e Historias en México número 2.